Adelgazar: La importancia del abordaje terapéutico
Tal y como hemos mencionado en varias ocasiones en este blog, la obesidad es una enfermedad compleja y adelgazar es un proceso que requiere esfuerzos.
Por ello cuando se busca una opción para combatir la obesidad además de buscar información sobre el tratamiento en sí, es importante conocer en detalle todo aquello que rodea a la propia técnica o tratamiento, es decir, además de la intervención que se lleve a cabo (método pose, balón intragástrico, método aspire, etc…) es importante saber cómo va a ser el abordaje terapéutico, qué profesionales van a intervenir y en qué fases se va a llevar a cabo.
Numerosos estudios médicos demuestran la eficacia que tiene el hecho de que el equipo médico pueda “intervenir” en el estilo de vida del paciente e incluir una serie de cambios destinados a conseguir la pérdida de peso.
La clave para conseguir adelgazar siempre es esa, con independencia de cual sea la técnica/tratamiento utilizado, es necesario conseguir que la persona con obesidad sea capaz de adoptar cambios significativos en su estilo de vida y mantenerlos a largo plazo. Para ello es fundamental el seguimiento médico.
Hace unos años realizamos un estudio observacional descriptivo sobre la evolución de dos grupos de pacientes:
A).- un grupo formado por pacientes a los que se les hizo un seguimiento exhaustivo y un abordaje terapéutico destinado a conseguir cambios en su estilo de vida.
B).- otro grupo de pacientes que sólo hicieron 5 visitas de seguimiento con nuestros especialistas.
Los resultados, hablan por sí solos:
- Los pacientes que SÍ realizaron el seguimiento tuvieron una pérdida de peso media de 22,2 kg. Consiguieron perder el 74,8% del sobrepeso/exceso de peso que tenían.
- Los pacientes que sólo acudieron a 5 visitas, perdieron peso, pero menos. Tuvieron una pérdida de peso media 15 Kg y el porcentaje de exceso de peso perdido fue de un 43,9% en comparación al 74,8% de los pacientes con los se llevó a cabo el seguimiento a medio plazo.
Esto trasladado al día a día y a la “búsqueda rápida de soluciones” que permitan acabar con el sobrepeso, demuestra que en la mayoría de casos esas opciones “rápidas” no existen y que, si bien es cierto que puede perderse peso rápidamente en unos días, este tipo de “soluciones rápidas” prácticamente nunca proporcionan buenos resultados a medio/largo plazo.
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