Razones por las que escoger técnicas de Endoscopia Bariátrica para tratar la obesidad

La obesidad se ha convertido en una epidemia mundial. España no se escapa de esta epidemia y según la Organización Mundial de la Salud, en el 2030  un 70% de los españoles tendrá sobrepeso y un 30% obesidad.

La obesidad afecta seriamente a la calidad de vida y se relaciona con una larga lista de enfermedades entre las que destacan Enfermedades Cardíacas, Diabetes tipo 2, Hipertensión, Apnea del Sueño, Problemas de Infertilidad, Trastornos Respiratorios….. sin olvidar la lista de cánceres cuyas posibilidades de desarrollo aumentan con la obesidad (cáncer de colon, próstata, riñón, mama, ovario, útero, etc….)

Es por ello que el poner fin a una enfermedad crónica como es la obesidad se ha convertido en una necesidad para muchas personas.

Cada vez son más las personas que deciden perder peso con técnicas endoscópicas.

Las técnicas endoscópicas como el Balón Intragástrico, el Método POSE o el Método Aspire permiten tratar diferentes categorías de sobrepeso, obesidad y obesidad grave sin necesidad de intervenir al paciente.

Explicamos aquí las principales ventajas  y aspectos a tener en cuenta de las técnicas de Endoscopia Bariátrica:

• Efectividad:  Todas las técnicas que se engloban bajo el concepto de Endoscopia Bariátrica han demostrado ser efectivas en el tratamiento del sobrepeso y la obesidad y existen numerosos estudios y publicaciones médicas con resultados de pérdida de peso satisfactorios en técnicas como el Balón Intragástrico o el Método POSE.

• Sin cirugía: Las técnicas de Endoscopia Bariátrica no requieren cirugía. Los procedimientos se realizan por endoscopia sin necesidad de intervenir al paciente.

• Ausencia de cicatrices: Cualquier procedimiento endoscópico para tratar el sobrepeso o la obesidad implica que el paciente no tendrá ninguna cicatriz visible.

• Bajo riesgo: A diferencia de otras técnicas para tratar la obesidad que se engloban bajo el concepto de ” Cirugía de la Obesidad” o “Cirugía Bariátrica” como pueden ser el bypass gástrico, tubo gástrico o banda gástrica, las técnicas endoscópicas tienen unos porcentajes de complicaciones infinitamente menores y unas tasas de complicaciones graves prácticamente inexistentes.

• Recuperación del paciente más rápida: Al no llevarse a cabo una intervención quirúrgica, la recuperación del paciente es mucho más rápida que con la cirugía de la obesidad. Habitualmente el alta se da en las 24 horas después de haberse realizado el procedimiento.

• Mayor comodidad para el paciente:  Después del procedimiento de endoscopia bariátrica, con independencia de la técnica que se utilice, pueden sentirse molestias como náuseas, sensación de hinchazón, dolor en la garganta, etc.. pero  en la mayoría de casos se trata de molestias leves que pueden tratarse con analgésicos por lo que la comodidad para el paciente es mayor que con otras opciones para tratar la obesidad.

• Seguimiento médico nutricional a largo plazo:  Existe la creencia generalizada de que las técnicas de cirugía de la obesidad son más efectivas a largo plazo y el grado de compromiso del paciente para seguir una dieta es inferior. Sin embargo, no es así, diferentes estudios han demostrado que también para técnicas de cirugía de la obesidad es necesario hacer un cambio de hábitos alimenticios y de estilo de vida, de lo contrario, a largo plazo se vuelve a ganar peso. Por tanto, el seguimiento nutricional a largo plazo- habitualmente de dos años- que acompaña a las técnicas endoscópicas es una razón más para asegurar que no sólo perdemos peso sino que tratamos y modificamos todos aquellos aspectos necesarios para tener unos buenos hábitos alimenticios y de estilo de vida a largo plazo.

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